El cine bélico, a través del proceso de identificación del espectador con los personajes, propicia que el primero viva el horror de la guerra como algo próximo. Desde la urgencia, la advBersidad y el sufrimiento inherentes a la guerra se explora tanto la miseria como la heroicidad del ser humano desprovisto de todo lo accesorio. Cabe señalar que el género ha sido utilizado también por el poder político como una herramienta de propaganda. Debido a la hegemonía industrial hollywoodiense, algunas de las guerras representadas con más profusión son la Guerra de Secesión, las Guerras Mundiales, el conflicto de la Guerra Fría o la guerra de Vietnam.
La batalla de Iwo Jima entre tropas norteamericanas y japonesas durante la Segunda Guerra Mundial y la utilización propagandística de las imágenes de guerra es abordada desde los puntos de vista norteamericano y japonés por parte de Clint Eastwood, que dirigió durante el mismo año Banderas de nuestros padres (Flags of Our Fathers, 2006) (primer vídeo) y Cartas desde Iwo Jima (Letters from Iwo Jima, 2006) (segundo).